A continuación te contamos lo que tenés que saber para aumentar su rendimiento y así prolongar su duración.

• Antes de enchufar la heladera por primera vez, es importante colocarla en su ubicación definitiva. Luego, realiza una leve inclinación hacia atrás, para que el gabinete quede nivelado, y así garantizar que las puertas cierren de forma correcta.
• Una vez nivelada, dejá reposar la nueva heladera en su nueva ubicación antes de encenderla para que el líquido y el gas se estabilice.  Este  “tiempo de estabilización” dependerá de la posición en la cual fue transportada. Si la transportaron en posición vertical, solo será necesario esperar una hora. En cambio, si vino en posición horizontal, se aconseja dejarla reposar entre 6 a 8 horas.

¿Qué hacer durante la estabilización?

• Aprovechar este tiempo para hacer una limpieza profunda (interior y juntas), evitando el contacto con el sistema de iluminación. Esto garantizará una heladera en condiciones para recibir tus bebidas y alimentos sin riesgos.
• Chequear su correspondiente descarga a tierra.
• Verificar que tenga espacio de ventilación.
• Chequear el manual de instrucciones del fabricante, ya que cada marca y modelo tiene su particularidad.
• NO reemplazar el toma corriente suministrado por el fabricante del producto.

¡Ahora si estás en condiciones de encender tu nueva heladera!

Si querés que tu heladera dure más, recordá destapar periódicamente el desagote para evitar fallas del producto.

Y no olvides que una heladera vacía consume más energía. Por esa razón, es importante lograr un correcto equilibrio entre espacio y abundancia de alimentos y bebidas, que a su vez permita que el aire circule.